¿Sabías que tus ojos necesitan nutrientes para mantenerse fuertes y saludables? El nervio óptico, que es el encargado de llevar la información visual del ojo al cerebro, no es la excepción.
Factores como el envejecimiento, enfermedades como el glaucoma o incluso la falta de ciertas vitaminas pueden afectar su funcionamiento. Entre los nutrientes más importantes están las vitaminas B12 y D, que ayudan a mantener tus fibras nerviosas activas y a reducir riesgos de daño visual.
Esto no significa que reemplacen tus tratamientos o controles médicos, pero sí que mantenerlas en niveles adecuados puede ser un aliado extra para tu salud ocular. Comer bien, exponerte al sol de forma moderada y, cuando sea necesario, tomar suplementos bajo supervisión médica puede marcar la diferencia.
Vitamina B12: protege y energiza tus nervios
La vitamina B12 es esencial para tus nervios. Una deficiencia puede causar síntomas como visión borrosa, pérdida de sensibilidad o incluso daños en el nervio óptico, según el National Institutes of Health (NIH). Mantenerla en niveles adecuados ayuda a que tus nervios transmitan la información visual correctamente y puede contribuir a prevenir lesiones en el nervio óptico.
La buena noticia: se encuentra en alimentos como carnes, pescados, huevos y leche. Si tienes una dieta vegana o problemas de absorción, tu especialista puede indicarte suplementos. Estudios indican que la B12 tiene un efecto protectivo en las fibras nerviosas, ayudando a que el nervio óptico funcione mejor.
Vitamina D: tu escudo contra el daño ocular
Aunque asociamos la vitamina D con los huesos, también juega un papel en la salud del nervio óptico. Niveles bajos se han relacionado con mayor riesgo de glaucoma y estrés oxidativo que afecta las fibras nerviosas (American Academy of Ophthalmology, AAO). Esto significa que mantener una exposición moderada al sol y consumir alimentos como pescados grasos o huevos puede ayudar a cuidar tus ojos.
Incorporar estas vitaminas a tu rutina diaria puede ser un paso extra para proteger el nervio óptico y cuidar tu visión. Recuerda que los suplementos son solo un complemento, y nada reemplaza tus controles regulares de glaucoma u otras enfermedades oculares.
