Aunque los nombres suenan similares, la hipertensión ocular y la hipertensión arterial son condiciones diferentes que afectan al cuerpo de maneras distintas. La hipertensión arterial se refiere a la presión de la sangre dentro de las arterias, mientras que la hipertensión ocular se relaciona con la presión dentro del ojo, conocida como presión intraocular (PIO). Confundirlas puede generar dudas sobre la prevención y el tratamiento adecuado de cada una.
Qué es la hipertensión ocular y por qué importa
La hipertensión ocular ocurre cuando la presión intraocular es más alta de lo normal, sin que haya señales de daño al nervio óptico. Según la American Academy of Ophthalmology (AAO), las personas con hipertensión ocular tienen un mayor riesgo de desarrollar glaucoma, por lo que es fundamental realizar controles regulares.
El monitoreo incluye medir la PIO y examinar el nervio óptico, además de evaluar otros factores de riesgo como edad, antecedentes familiares y grosor corneal. Detectar a tiempo la hipertensión ocular permite implementar medidas preventivas y retrasar o evitar la aparición del glaucoma.
Hipertensión arterial: un problema del corazón y las arterias
Por otro lado, la hipertensión arterial es la presión elevada de la sangre en las arterias y afecta principalmente al corazón, riñones y cerebro. Se mide con un tensiómetro y requiere cambios de estilo de vida, dieta, ejercicio y, en algunos casos, medicación. Aunque la hipertensión arterial no provoca glaucoma directamente, sí puede influir en la salud ocular al afectar la circulación sanguínea en los ojos.
Diferencias clave y cuidado integral
La principal diferencia es que la hipertensión ocular afecta solo al ojo y está ligada al riesgo de glaucoma, mientras que la hipertensión arterial es sistémica y puede causar problemas cardiovasculares. Mantener ambas bajo control es fundamental: una revisión regular de la PIO y controles médicos generales contribuyen a proteger la visión y la salud general.
En Glaucoma Lima Center, nuestros especialistas realizan mediciones precisas de la presión intraocular, identifican factores de riesgo y brindan recomendaciones personalizadas para cuidar tu salud visual y prevenir el glaucoma.
