La cirugía de cataratas es uno de los procedimientos oculares más seguros y con mayor tasa de éxito en todo el mundo. Sin embargo, incluso con los mejores resultados, es normal que el ojo necesite un tiempo para adaptarse al nuevo lente intraocular. En los primeros días, la visión puede no ser perfecta: algunas personas describen una ligera sensación arenosa, visión borrosa o un aumento de la sensibilidad a la luz. Lejos de ser señales de alarma, estos síntomas suelen formar parte del proceso natural de recuperación.
Según la American Academy of Ophthalmology (AAO), la mayoría de los pacientes notan una mejora progresiva en su visión durante la primera semana. También es frecuente que los colores se perciban más vivos o brillantes, ya que el cristalino opaco que antes filtraba la luz ha sido reemplazado. Estas variaciones son temporales y, en la mayoría de los casos, desaparecen por completo conforme el ojo sana.
Molestias esperables durante la recuperación
En las primeras 48 a 72 horas es común notar enrojecimiento leve, lagrimeo o una sensación de cuerpo extraño. Algunos pacientes sienten pequeñas molestias o “pinchazos”, que pueden controlarse con las gotas antiinflamatorias o antibióticas indicadas por el especialista. Según Mayo Clinic, el ojo suele estabilizarse entre dos y seis semanas después de la cirugía, dependiendo de la respuesta individual y de la técnica empleada.
También puede presentarse visión fluctuante, especialmente al cambiar de iluminación. Esto ocurre porque el ojo todavía se adapta al enfoque con el nuevo lente intraocular. No se recomienda frotar los ojos ni realizar esfuerzos físicos intensos durante los primeros días, ya que esto podría interferir con la cicatrización.
Cuándo acudir al oftalmólogo
Aunque las molestias leves son normales, ciertos síntomas requieren atención médica inmediata. El National Eye Institute (NEI) advierte que el dolor intenso, la pérdida súbita de visión o la secreción abundante pueden indicar complicaciones, como una infección o inflamación interna. Ante cualquiera de estos signos, se debe contactar al oftalmólogo sin demora.
La recuperación visual total tras la cirugía de cataratas depende tanto de la técnica como de los cuidados posteriores. Asistir a las citas de control, cumplir con el tratamiento y proteger los ojos del polvo o del sol son pasos esenciales para un resultado exitoso.
En Glaucoma Lima Center, nuestros especialistas te acompañan en cada etapa del proceso, asegurando un seguimiento personalizado para que recuperes tu visión con tranquilidad y confianza.
